Esta edición de los Juegos, fueron la confirmación del movimiento Olímpico, Tuvieron la mejor organización, marcaron un antes y un después en la historia de los Juegos y supusieron un éxito económico que no había tenido precedente. Este superávit tuvo a su mejor aliado en la edición de sellos y monedas conmemorativas que se vendieron a coleccionistas de todo el mundo.
En el aspecto tecnológico se incluyó el cronometraje electrónico y la foto finish, con lo que se evitó las suspicacias existentes hasta entonces con las decisiones de los jueces.
Por primera vez estuvieron representados los cinco Continentes, ya que participó Japón, como representante asiático. Esta fue otra edición en la que España no tuvo representación.
ELECCION
Suecia tras los Juegos de Londres, se interesó por la organización de los Juegos del 1912. Victor Balck y Clarence van Rosen, miembros del C.O.I., convencieron a las autoridades deportivas, para que estudiaran esta posibilidad. Estas presentaron al Rey Gustavo V la propuesta, junto al presupuesto de 415.000 coronas suecas, que fue aceptado.
El Comité Olímpico Internacional en su 10ª sesión el 28 de Mayo de 2009, recibió la propuesta firme del gobierno sueco. Pierre de Coubertin hizo una reflexión en este Congreso sobre cual es su idea de los Juegos. Esta fue la frase que lo resume: “los Juegos deberían conocerse únicamente por lo atlético; deberían ser más dignos, discretos e íntimos; tendrían que estar más en concordancia con los requisitos clásicos y artísticos; y, sobre todo, deberían ser más baratos”. Dado que no había otra candidatura se concedió la organización a Estocolmo.
También se acordó con el Comité Olímpico Alemán que los juegos de 1916 tendrían como sede a Berlin.

Victor Gustaf Balk – Presiedente Comité Sueco
COMITE EJECUTIVO
En el último trimestre de 1909 se efectuó el nombramiento de los miembros del Comité Ejecutivo, cuya presidencia recayó en Victor Gustaf Balck, mientras que la presidencia de honor fue para el Rey Gustavo V. Compusieron este comité 187 miembros.
Entre los acuerdos fuera del ámbito deportivo, se acordó efectuar un descuento en los trenes para los participantes. Se puso en marcha un periódico en sueco e ingles sobre los Juegos.