No habiéndose podido celebrar los Juegos de la VI Olimpiada, previstos en Berlin en 1916, debido a la disputa de la 1ª Guerra Mundial, el Comite Olímpico Internacional, decidió adjudicar la organización de los Juegos de la VII Olímpiada a la ciudad belga de Amberes, como homenaje a sus habitantes, ya que se consideraba la “ciudad mártir” de la guerra. Fue elegida en competencia con Lyon y Amsterdam.
Teniendo en cuenta que Bélgica era una ciudad destrozada, tras los cuatro años de guerra y ocupación alemana, hubieron defectos, las sedes donde se competía hechas deprisa y la lluvia continua, hicieron que mostraran baches y orificios antes de la inauguración y hubo escasa participación de espectadores, dado a que la situación económica, no permitía poder gastar los ahorros en asistir a las competiciones.
Las potencias perdedoras en esta guerra: Alemania, Austria, Hungría, Turquía, Bulgaria, Polonia no fuero invitadas a participar en los Juegos, en tanto que la Unión Soviética no participó por estar en plena Guerra Civil por la revolución bolchevique.
ESPAÑA VUELVE A PARTICIPAR EN LOS JUEGOS
España, auspiciado por el Comité Olímpico Español que presidía Gonzalo de Figueroa y Torres, envió un conjunto formado por 57 deportistas masculinos que participaron en seis deportes (atletismo, fútbol, natación, polo, tenis y tiro) y dieciseis pruebas.
PARTICIPACION Y DEPORTES
Estos Juegos congregaron a 2626 atletas (2561 hombres y 65 mujeres) representando a 29 países que competirían por conseguir el título en 156 pruebas de 22 disciplinas.
En cuanto a deportes en relación a Estocolmo-1912, se incluyeron: Boxeo, Halterofilia, Hockey, Polo, Rugby y dos deportes de invierno como son el Patinaje Artístico que hacía su segunda aparición y el Hockey sobre hielo que debutaba.
NOVEDADES DE LOS JUEGOS – BANDERA OLIMPICA
En estos Juegos se hizo obligatorio que cada uno de los participantes, fueran inscritos a través de sus Comités Olímpicos Nacionales.
La novedad mas importante fue la aparición de la Bandera Olímpica con los cinco aros entrelazados, que representan los cinco continentes y la unidad mundial, además del hecho de que en todas las banderas aparecen como mínimo uno de esos colores.
Diseñada en 1913 y encargada por el Barón de Coubertin, para la edición de 1916, pero al suspenderse la guardó en su despacho y la presento en un acto previo a la Ceremonia de Inauguración de Amberes.
También tuvo lugar por primera vez el juramento efectuado por uno de los deportistas.

Badera olimpica original